Art. 2 de 2: Parque Esperanza

Una historia de éxito: empresa familiar Parque Esperanza

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Organizamos un nuevo webinar centrado en empresas familiares, en el que contamos con la preciencia y experiencia de nuestros invitados especiales: los hermanos Marcela y Javier Hermosilla Kaschel, de Parque Esperanza.

Se trata de la historia de éxito de una empresa con 37 años de experiencia en la administración de dos cementerios parque, funerarias en Puerto Montt y Puerto Varas, un crematorio humano, memorial de cenizas y, ahora, con un nuevo proyecto: un crematorio para mascotas.

Esta instancia, moderada por Verónica Matte, máster en Economía y Dirección de Empresas del IESE, permitió conocer una historia de crecimiento, que conjuga profesionalización y arraigo familiar.

Parque Esperanza fue fundado por el padre de los actuales líderes, un emprendedor visionario que, acompañado por su esposa, desarrolló el primer cementerio parque de Puerto Montt en 1988. Desde sus inicios, el negocio se construyó con base en valores como la honestidad, la excelencia, el compromiso humano y el cuidado del entorno. Una de las ventajas de una empresa familiar es que los valores familiares se ven traspasados a la empresa, relata Javier. Un ejemplo: “Para mi madre, el parque es su jardín”, y ese sello de cuidado y cariño se ha transferido a colaboradores y clientes.

En la empresa familiar, Marcela trabajó con su padre más de 12 años como gerente de administración y finanzas, y Javier fue gerente de ventas y de operaciones, viniendo de un rubro completamente distinto. Llegaron a la empresa porque su padre se los solicitó. 

El salto

En una empresa familiar, los valores están presentes en cada decisión que se toma. Es más, el modelo familiar ha sido una ventaja competitiva. “Nosotros cuidamos cada peso como si fuera nuestro, porque lo es. Eso genera una cultura de responsabilidad que se transmite a todo el equipo”, señalan. Y, en paralelo, destacan cómo la cercanía con trabajadores y clientes se convierte en una fortaleza que diferencia a la empresa en un rubro especialmente sensible.

La estructura familiar fortalecía, pero a la vez, dificultaba algunos procesos de cambio, dicen, por eso consideraron clave el salto a la profesionalización, el cual, permite asegurar la continuidad del negocio y proyectarlo hacia el futuro. Manteniendo, claro, el control y servicio de calidad.

El éxito de Parque Esperanza se explica por una combinación de visión emprendedora, integración vertical del negocio, cuidado de la reputación y apertura al asesoramiento experto. Desde que era pequeña, se buscó apoyo externo especializado para decisiones estratégicas.

Además, “tenemos muy clara la diferencia entre ser propietarios y administrar”, afirmó Marcela, quien lideró junto a su hermano la conformación de un directorio y el avance hacia una estructura más profesional. 

La historia de Parque Esperanza es un ejemplo de cómo las empresas familiares pueden combinar tradición y profesionalismo, valores y eficiencia, apego y cercanía con visión estratégica. 

En Grant Thornton Chile, creemos que este tipo de conversaciones permiten visibilizar buenas prácticas, inspirar a otras familias empresarias y reafirmar el rol que cumplen estas organizaciones en el desarrollo económico y social del país.